lunes, 29 de noviembre de 2010

El Káiser Guillermo I

Guillermo I, Wilhelm Friedrich Ludwig (1797 -1888), de la Casa de Hohenzollern, fue rey de Prusia de 1861 a 1888 y primer Emperador de Alemania de 1871 a 1888.


Un joven príncipe prusiano


El futuro rey y emperador Federico Guillermo Luis de Prusia (Wilhelm Friedrich Ludwig von Preußen) era el segundo hijo del rey Federico Guillermo III y de Luisa de Mecklemburgo-Strelitz. No se esperaba que Guillermo ascendiera al trono y por lo tanto recibió poca educación. Sirvió en el ejército desde 1814 en adelante, luchó contra Napoleón I durante las Guerras Napoleónicas y fue un valiente soldado. También se convirtió en un diplomático excelente en las misiones después de 1815.

En 1854, el príncipe fue elevado al rango de mariscal de campo y nombrado gobernador de la fortaleza federal de Maguncia. En 1857 Federico Guillermo IV sufrió un derrame cerebral y quedó incapacitado mentalmente para el resto de su vida. En enero de 1858, William se convirtió en príncipe regente por su hermano.

Estandarte personal del Emperador

Rey

El 2 de enero de 1861 Federico Guillermo murió y el príncipe regente ascendió al trono como Guillermo I de Prusia, heredando un conflicto entre Federico Guillermo y el parlamento liberal. Se le consideraba una persona políticamente neutral ya que intervino menos en la política de su hermano. Sin embargo, encontró una solución conservadora para el conflicto: nombró a Otto von Bismarck al cargo de Primer Ministro. De acuerdo con la Constitución prusiana, el Primer Ministro era responsable únicamente ante el rey, no el Parlamento. Bismarck gustaba ver su relación laboral con Guillermo como la de un vasallo a su señor feudal. Sin embargo, fue Bismarck quien efectivamente dirigió la política, tanto nacional como extranjera; en varias ocasiones obtuvo el dictamen favorable de Guillermo amenazando con renunciar.


Emperador

Durante la Guerra Franco-Prusiana, el 18 de enero de 1871, Guillermo fue proclamado Emperador Alemán en el Palacio de Versalles.Este título fue elegido cuidadosamente por Bismarck después de la discusión hasta (y después) el día de la proclamación. Guillermo aceptó de mala gana este título pues él hubiera preferido "Emperador de Alemania", el cual, sin embargo, era inaceptable para los monarcas federados y también hubiera manifestado una reivindicación a tierras fuera de su reino (Austria, Suiza, Luxemburgo, etc.) El título de "Emperador de los Alemanes", como se propuso en 1848, fue descartado ya que se consideraba elegido "por la gracia de Dios", no por el pueblo como en una república democrática.

Wilhelm I a caballo con Bismarck y Moltke


En el Imperio alemán (Kaiserreich), el emperador (Káiser) era jefe de Estado y presidente (primus inter pares - primero entre iguales) de los monarcas federados (los reyes de Baviera, Württemberg, Sajonia, los grandes duques de Baden, Mecklenburgo, Hesse, así como otros principados, ducados y los senados de las ciudades libres de Hamburgo, Lübeck y Bremen).


Intentos de asesinato

El 11 de mayo de 1878, un plomero llamado Emil Max Hodel fracasó en un intento de asesinato a Guillermo en Berlín. Hodel utilizó un revólver para disparar al Emperador de Alemania, mientras que el monarca y su hija, la princesa Luisa de Prusia, desfilaban en su carruaje. Cuando la bala se perdió, Hodel corrió por la calle y disparó otra ronda que también se perdió. En la conmoción una de las personas que trató de detener a Hodel sufrió graves lesiones internas y murió dos días después. Hodel fue decapitado el 16 de agosto de 1878.

Un segundo intento de asesinar a Guillermo I ocurrió el 2 de junio de 1878 por Karl Nobiling.Como el monarca pasó por delante en un coche abierto, el asesino disparó con una escopeta al Kaiser desde la ventana de una casa del bulevar "Unter den Linden". Guillermo fue herido y trasladado de nuevo al palacio y Nobiling se pegó un tiro en un intento de suicidio. Mientras Guillermo sobrevivió a este ataque, el asesino murió de sus heridas auto-infligidas tres meses después.
El Emperador

Matrimonio

La esposa de Guillermo I fue la Princesa Augusta María Luisa Catalina de Sajonia-Weimar-Eisenach (Augusta Marie Luise Katharina), Duquesa de Sajonia. Augusta era la segunda hija de Carlos Federico, Gran Duque de Sajonia-Weimar-Eisenach, y de la Gran Duquesa María Pavlovna de Rusia, hija del zar Pablo I de Rusia y de la zarina Sofía Dorotea de Wurtemberg.

Augusta sólo tenía 15 años en 1826 cuando se encontró por primera vez con el que sería su futuro marido, el Príncipe Guillermo de Prusia. Tras este primer encuentro Guillermo consideró que la joven Augusta tenía una “personalidad excelente”, pero que era menos atractiva que su hermana pequeña, María (con la que contraería matrimonio el hermano menor de Guillermo, Carlos de Prusia).
Augusta de Saxe-Weimar-Eisenach, reina consorte de Prusia


En aquel momento, Guillermo estaba enamorado de una princesa polaca, Eliza Radziwill. Como su hermano mayor no tenía hijos se esperaba que Guillermo contrajera matrimonio y tuviera herederos. A Federico Guillermo III de Prusia le agradaba la relación entre Guillermo y Eliza, pero la corte prusiana había descubierto que los antepasados de la princesa habían comprado el título de príncipes al emperador Maximiliano I y, como habían adquirido el título, su linaje no parecía lo suficiente noble para que contrajera matrimonio con uno de los herederos del trono de Prusia. Por esta razón, el rey prusiano comenzó a buscar alternativas.

En 1824 el rey pidió al zar Alejandro I de Rusia, que no tenía hijos, que adoptara a la princesa Elisa, pero éste declinó. El segundo intento de adopción por parte del tío de Elisa, el Príncipe Augusto de Prusia, también fracasó porque el comité responsable de los matrimonios de la realeza prusiana consideró que la adopción no cambiaba la “sangre” del linaje. Otro factor que obstaculizó el matrimonio entre Guillermo y Elisa fue la influencia opuesta al enlace de la reina Luisa de Prusia en las cortes alemanas y prusianas. Esta oposición de la reina se debía a su enemistad con el padre de Elisa.

De esta forma, en junio de 1826, el padre de Guillermo se sintió forzado a renunciar al potencial matrimonio de su hijo con la princesa Elisa. Durante los meses siguientes el príncipe Guillermo comenzó a buscar una novia más adecuada, pero no renunció a sus lazos emocionales con Elisa. Finalmente el 29 de agosto, Guillermo pidió la mano de Augusta de Sajonia en matrimonio (por escrito y mediante la intercesión de su padre el rey de Prusia). Augusta aceptó de buen grado la propuesta y el 25 de octubre de 1828 fueron prometidos oficialmente. Guillermo se reunió con Elisa por última vez en 1829.
Estandarte personal de la Emperatriz Augusta


El 11 de junio de 1829, después de un fatigoso viaje de tres días desde Weimar a Berlín, Guillermo se casó con su prometida, que era 14 años más joven que él, en la capilla del Palacio de Charlottenburg. Las primeras semanas de matrimonio fueron armoniosas y Augusta fue aceptada favorablemente en la corte prusiana. Sin embargo, pronto comenzó a aburrirse con la sobriedad militar de la corte y la mayor parte de los actos oficiales (que tal vez habrían podido distraerla) estaban reservados para su cuñada, la Princesa Isabel Ludovica de Baviera.

En una carta que el Príncipe Guillermo escribió el 22 de enero de 1831 a su hermana Carlota, zarina consorte de Rusia, se lamentaba de la “carencia de feminidad” de su esposa. Ese mismo año nació su primer hijo, el Príncipe Federico (que posteriormente se convertiría en Federico III de Alemania) y su hija, la Princesa Luisa, nacería el 3 de diciembre de 1838.

Su hijo Federico, Príncipe Heredero de Prusia (1870)


Problemas familiares

El rey de Prusia se negó a conceder una constitución a Alemania y prefirió actuar mediante un gobierno conservador, contradiciendo sus ideas y opiniones liberales durante su período como príncipe. Se creó un Landstag (parlamento) unido en respuesta a las malas cosechas, hambrunas y subsiguientes revueltas de 1847, pero el monarca lo disolvió unos pocos meses después. El Príncipe Guillermo fue considerado responsable del baño de sangre de la revolución de marzo de 1848 en Berlín, y aconsejado por el rey, Guillermo se exilió a Londres y su esposa Augusta se retiró a Potsdam con sus dos hijos.

Debido a estas actitudes del monarca prusiano, entre los círculos liberales comenzó a debatirse si era adecuado o no obligar al rey a abdicar. Finalmente el príncipe abdicó de sus derechos y Federico, el hijo de Augusta, se convirtió en el nuevo heredero. Augusta asumió la regencia de su hijo. En mayo de 1848, ochocientos miembros de la Asamblea Nacional de Alemania se reunieron en Frankfurter Paulskirche para discutir el proceso de unificación del país y el Príncipe Guillermo regresó de Londres al mes siguiente. En 1849 fue nombrado gobernador general de la Provincia del Rin y en la primavera de 1850 él y Augusta se asentaron en Coblenza.

Su hija Luisa, futura Gran Duquesa de Baden (1856)


En 1856, su hija Luisa se casó a los 17 años con el Gran Duque Federico de Baden-Baden y en 1858 su hijo Federico se casaba con Victoria, Princesa Real del Reino Unido, hija mayor de la reina Victoria. Augusta consideró este segundo enlace un triunfo personal ya que consideraba que su nuera, educada en un país moderno como el Reino Unido, convertiría a su hijo Federico en un monarca liberal.

Cuando Príncipe Guillermo se convirtió en regente, ambos viajaron a la corte prusiana en Berlín. Guillermo pronto se deshizo del viejo gobierno cuando sucedió a su hermano, en 1861 y nombró ministros liberales, procedentes de su propia corte de Coblenza. La reina consideraba a Otto von Bismarck, el nuevo Primer Ministro, como su principal oponente en la corte prusiana. Bismarck, por su parte, despreciaba a la reina por su influencia sobre su marido.


La Emperatriz

La Guerra Austro-Prusiana terminó en 1866, pero cuatro años después estalló la Guerra Franco-Prusiana y Augusta continuó responsabilizando a Bismarck en persona de los horrores del conflicto. Sin embargo, tras la guerra entre ambos países, Guillermo se convirtió en Emperador de Alemania, y en consecuencia, Augusta se convirtió en Emperatriz.


El Emperador y la Emperatriz


Augusta consideraba la Corona Imperial como una derrota personal; había deseado que la supremacía prusiana en Alemania se consiguiera mediante la “conquista moral” y no mediante el derramamiento de sangre. La emperatriz enterraría sus diferencias con Bismarck en los últimos años de su reinado, pues parecía el único hombre adecuado para apoyar a su amado nieto Guillermo. Sin embargo, a Guillermo le desagradaba Bismarck y poco después de heredar el trono alemán le obligó a dimitir.

Finalmente la emperatriz y el emperador hicieron las paces en 1887, pero él murió al año siguiente. Por su parte, sólo 99 días después, su hijo Federico, que había sucedido a su padre como Federico III de Alemania, sucumbió a un cáncer de laringe. Pese a todo pudo ser testigo de cómo su amado nieto Guillermo se convertía en emperador ese mismo año. Moriría en 1890, dos años después que su esposo, a los 78 años.

Hurra 4 Kaiser: Friedrich III, Wilhelm I, Wilhelm II, Friedrich Wilhelm (1887)


Títulos completos del emperador de Alemania

Su Majestad Imperial y Real Guillermo Primero, por la Gracia de Dios, Emperador de Alemania y Rey de Prusia, Margrave de Brandenburgo, Burgrave de Nuremberg, Conde de Hohenzollern , soberano y supremo Duque de Silesia y del Condado de Glatz , Gran Duque del Bajo Rin y de Posen, Duque de Sajonia, de Westfalia, de Angria, de Pomerania, Lunenburg, Holstein y Schleswig, de Magdeburgo, de Bremen, de Güeldres, Cléves, Jülich y Berg, Duque de los Wendos y los Kassubianos, de Crossen, Lauenburgo y Mecklemburgo, Landgrave de Hesse y Turingia, Margrave de Alta y Baja Lusacia, Príncipe de Orange, Príncipe de Rügen, de Frisia Oriental, de Paderborn y Pyrmont, de Halberstadt, Münster, Minden, Osnabrück, Hildesheim, de Verden, Cammin, Fulda, Nassau y Moers; Conde Principesco de Henneberg, Conde de la Marca, de Ravensberg, de Hohenstein, Tecklenburgo y Lingen, de Mansfeld, Sigmaringen y Veringen; Señor de Frankfurt.



domingo, 28 de noviembre de 2010

Noticias del Imperio

El Imperio alemán (en alemán: Deutsches Reich, llamado por algunos historiadores alemanes Kaiserlich Deutsches Reich o simplemente Kaiserreich) se refiere a Alemania desde su unificación y la proclamación de Guillermo I como emperador en 1871 hasta cuando se convirtió en una república después de la derrota en la Primera Guerra Mundial y la abdicación de Guillermo II en 1918.

El término de Deutsches Reich se mantuvo como nombre oficial de Alemania durante la República de Weimar y la mayor parte del período nazi hasta 1943, cuando fue cambiado a Großdeutsches Reich («Gran Imperio Alemán»).
El escudo de armas imperial


Durante sus 47 años de existencia, el Imperio alemán surgió como una de las economías industriales más poderosas de la Tierra y una gran potencia, hasta que se derrumbó después de su derrota militar en la Primera Guerra Mundial y la Revolución de Noviembre. Los estados fronterizos más importantes fueron el Imperio ruso en el este, Francia en el oeste y el Imperio austrohúngaro en el sur.


Antecedentes

La historia alemana del siglo XIX se ha caracterizado hasta la formación del Estado-nación de múltiples cambios políticos y territoriales que se produjeron tras el colapso del Sacro Imperio Romano Germánico de 1806 en una nueva fase. El Imperio Antiguo, mantenido por los emperadores del Sacro Imperio Romano Germánico antiguamente y en estructuras supranacionales, se caracteriza cada vez más por los intereses conflictivos de sus dos grandes potencias: Alemania, Austria y el ascenso de Prusia. Atravesando las guerras napoleónicas, la fundación se inició por parte de Francia, en la Confederación del Rin.


Insignia de guerra usada por la Reichsflotte (Flota Imperial) de 1848 a 1852


Tras un tiempo de intensificación, causado por el ejemplo de la Revolución Francesa y las guerras napoleónicas en la mayoría de Europa, en el país de habla alemana se movilizó la idea de nación como base de construcción. Como se trataba de una sola solución de Gran Reich Alemán, entre ellos Austria, a la que llamaban «la solución de un pequeño reino alemán sin Austria».

Luego del Congreso de Viena, Alemania estuvo marcada por una política de restauración. Como parte de la llamada Santa Alianza, se hizo un primer acuerdo de alianza entre Austria, Prusia y Rusia. La restauración debió restablecer las relaciones de poder entre estados nacionales y del Antiguo Régimen en Europa, ya que habían existido antes de la Revolución Francesa en 1789.

Esta política de oponerse a la nación y los movimientos democrático-burgueses llevó a numerosas encuestas en muchas partes de Europa Central, que finalmente incluyeron la Revolución de Marzo de 1848 en los estados alemanes. Los miembros de la revolución por la recién formada Alemania crearon el primer parlamento democráticamente, la Asamblea Nacional de Fráncfort. Al rey prusiano Federico Guillermo IV se le entregó la corona imperial alemana. Debido a esto, sin embargo, apelando a su "derecho divino" se negó al intento fallido, la mayoría de los estados alemanes decidieron unirse en una base constitucional.

Otto von Bismarck, Ministerpräsident del Reino de Prusia (1862-1873), 1r Canciller del Imperio Alemán (1871-1890)


En 1864, el gobierno federal había llegado una alianza unificada de gran importancia con Austria, como en la cuestión de Schleswig-Holstein de la guerra alemana-danesa, en la que Prusia y Austria a causa de una aplicación federal estaban una al lado de otra. Sin embargo, este consenso entre las dos potencias duró poco. En la disputa sobre el Schleswig-Holstein en 1866 fueron los alemanes los que iniciaron la Guerra Austro-Prusiana en la que los austríacos lucharon contra los ejércitos de Prusia y algunos estados del norte de Alemania, junto a Italia, y los estados del sur, incluyendo Baden, Baviera, Hesse y Württemberg. Después de la derrota de Austria, al final de la Confederación Germánica, la Confederación Alemana del Norte fue establecida bajo el liderazgo de Prusia.

Accionada por una disputa entre Prusia y Francia en la Sucesión Española en 1870 comenzó la Guerra Franco-Prusiana. La declaración de guerra llegó desde el lado francés. Los estados del sur de Alemania se anexionaron a Prusia. Bismarck utilizó este acto para conducir la coronación del rey de Prusia como emperador de Alemania por delante y por lo tanto la integración de los estados del sur como parte de una pequeña solución alemana en el reino unido. Las tres guerras que duraron desde 1864 hasta 1871, también se conocieron como las guerras de la unificación alemana.


Armas de los Kaisers alemanes (1871-1889)


La fundación del imperio

Bismarck se preparó un amplio esquema, la Constitución alemana del norte de 1866, se convirtió en la Constitución alemana de 1871, con algunos ajustes. Alemania adquirió algunos rasgos democráticos. En el nuevo imperio había un parlamento con dos cámaras. La cámara baja, o el Reichstag, fue elegido por sufragio universal masculino.

La legislación también requería la aprobación del Bundesrat, el consejo federal de diputados de los estados del Reich. El poder ejecutivo residía en el emperador, o Káiser (proveniente del emperador romano César). Al emperador se le dieron amplios poderes por la Constitución. El canciller era el comandante en jefe supremo de las fuerzas armadas, y el árbitro final de todas las relaciones internacionales. Oficialmente, el canciller era un gabinete de un solo hombre y fue responsable de la conducta de todos los asuntos del estado, prácticamente (como burocracia de altos funcionarios a cargo de los campos como las finanzas, la guerra, las relaciones internacionales, etc) se parecía al Presidente del Consejo de Ministros. El Reichstag tenía el poder de aprobar, modificar o rechazar proyectos de ley y de iniciar una legislación.

Proclamación del Imperio Alemán en el Palacio de Versalles: 18 de enero de 1871


Aunque de iure todos los estados tenían el mismo poder ejecutivo, prácticamente, el imperio estaba dominado por el estado más grande y poderoso, Prusia. Se extendía por el norte y poseía dos terceras partes del Reich, y contenía tres quintas partes de su población. La corona imperial era hereditaria de la Dinastía de los Hohenzollern, la casa reinante de Prusia. Con la excepción de años como 1872-1873 y 1892-1894, el canciller fue siempre al mismo tiempo el primer ministro de Prusia. Con 17 votos de los 58 en el Bundesrat, Berlín sólo necesitaba unos cuantos votos de los estados pequeños para ejercer un control efectivo.

Antes de la unificación, el territorio alemán se componía de 26 estados constituyentes. Estos estados consistieron en reinos, grandes ducados, ducados, principados, y ciudades hanseáticas libres en un territorio imperial. El Reino de Prusia era el mayor de los estados, que cubría alrededor del 60% del territorio del Imperio alemán.

· Reinos
Prusia, Baviera, Sajonia, Würtemberg
·
Grandes Ducados
Baden, Hesse, Mecklemburgo-Schwerin, Mecklemburgo-Strelitz, Oldenburgo, Sajonia-Weimar
·
Ducados
Anhalt, Brunswick, Sajonia-Altenburgo, Sajonia-Coburgo-Gotha, Sajonia-Meiningen
·
Principados
Lippe, Reuss (Línea menor), Reuss (Línea mayor), Schaumburg-Lippe, Schwarzburg-Rudolstadt, Schwarzburg-Sondershausen, Waldeck-Pyrmont
·
Ciudades Hanseáticas Libres
Bremen, Hamburgo, Lübeck

Territorios del Imperio Alemán


Los otros estados conservaron sus propios gobiernos, pero se limitaron sólo a los aspectos de la soberanía. Por ejemplo, los sellos postales emitidos por el imperio en su conjunto, al igual que la moneda eran a través de una marca. Las piezas superiores valoradas, fueron emitidas por los estados, pero estas eran prácticamente las monedas conmemorativas y tenían una circulación limitada.

Mientras que los estados tenían sus propias condecoraciones, y algunos tenían sus propios ejércitos, las fuerzas militares de los más pequeños fueron puestos bajo control prusiano. Aquellos de los estados más grandes, como los reinos de Baviera y Sajonia, se coordinaron a lo largo de principales de Prusia y en tiempo de guerra eran controlados por el gobierno federal.

La evolución del Imperio alemán es algo en consonancia con los desarrollos paralelos en el reino de Italia que se convirtió en una nación unida, diez años antes que el Imperio alemán. Algunos elementos clave de la estructura política autoritaria del imperio alemán también fueron la base para la modernización conservadora en el Japón imperial de Meiji y la conservación de una estructura política autoritaria bajo los zares del Imperio ruso.

El canciller Bismarck en sus años finales

Bajo el liderazgo de Prusia y de Bismarck, Alemania se había convertido en una nación y una potencia mundial. En 1871, 39 estados independientes se unieron. Los reyes de Sajonia y Baviera, los príncipes, duques y electores de Brunswick, Baden, Hannover, Mecklemburgo, Wurttemberg, Oldenburgo, juraron lealtad al rey de Prusia, el Káiser. Con la unidad se produjo un aumento extraordinario de la energía y la expansión.

Las políticas internas de Bismarck jugaron un gran papel en la creación de una cultura política autoritaria en el imperio. Menos preocupada por la política del poder después de la unificación continental en 1871, el gobierno semi-parlamentario de Alemania llevó a cabo una revolución relativamente suave, económica y política desde arriba que los empujó a lo largo del camino a convertirse en la principal potencia industrial de la época.

El 9 de marzo de 1888 Guillermo I murió poco antes de su cumpleaños número 91, dejando a su hijo Federico III como nuevo emperador. Federico era un liberal y un admirador de la constitución británica, mientras sus lazos con Gran Bretaña fueron reforzados, también lo fue aún más por su matrimonio con la Princesa Real de Inglaterra, la hija mayor de la reina Victoria. Con su ascenso al trono, muchos esperaban que el reinado de Federico diera lugar a una liberalización del Reich y un aumento de la influencia del parlamento sobre el proceso político.


Federico Guillermo de Prusia (futuro Federico III) con su hijo Guillermo (futuro Guillermo II) en Balmoral Castle, 1863.


Sin embargo, en el momento de su ascensión al trono, Federico había desarrollado cáncer de laringe incurable y murió el día 99 de su gobierno, el 15 de junio de 1888. La muerte de Federico III llevó a la ascensión de su hijo Guillermo II como emperador. Debido a la rápida sucesión de estos tres monarcas, el año 1888 se conoce como el Año de los Tres Káisers (en alemán: Dreikaiserjahr).

Con la salida de Bismarck como canciller en 1890, Guillermo II se convirtió en el líder dominante de Alemania. A diferencia de su abuelo, quien se había mostrado satisfecho con la cesión de los asuntos de gobierno a su canciller, Guillermo II quería estar activo en los asuntos de Alemania y quería ser un líder de conocimiento, no una figura ornamental. En las apariciones oficiales y fotografías, Guillermo II intentó con cierto éxito ocultar su brazo izquierdo problemático que se había debido así debido un problema en su parto. Guillermo II se convirtió en el plano internacional, reconocido por su agresiva política exterior y errores estratégicos, que empujó al Imperio alemán al aislamiento político y más tarde a la Primera Guerra Mundial.


El emperador sostiene su mano izquierda enferma con su mano derecha.


La Constitución garantizaba al emperador una gran libertad de acción. Las decisiones del monarca jugaron con los diversos órganos asesores, como las funciones civiles imperiales, militares y navales importantes del gabinete. Se añadieron a la corte y al confidente íntimo del emperador. Ya con Guillermo I, el monarca tuvo una influencia considerable sobre la política, por lo general sin interferir sobre las decisiones importantes. Bajo el emperador Guillermo II y su reivindicación de una norma personal, el puesto del emperador se convirtió en uno de los centros de poder clave del imperio.

Apenas es diferente el rango de emperador que el del Presidente de la Confederación en un reino monárquico. Incluso fuera de Prusia no sólo las celebraciones eran de distintas dinastías, sino que también celebraban el cumpleaños del Emperador, que se estaba convirtiendo en un símbolo. No se discute que la influencia imperial se limitó a 1897, sin embargo, mientras que la importancia del emperador aumentó de manera significativa, para 1908 otra vez perdió importancia. Ciertos hechos de dominio público provocaron que el prestigio del emperador se redujese -pero no la institución de la monarquía-, en la opinión pública.



Firma del emperador Guillermo II


Durante la Primera Guerra, al Káiser se le atribuyeron poderes similares a los de una dictadura de dos hombres en 1916 dirigida por el líder alemán de Alto Mando, el futuro presidente de Alemania y mariscal de campo Paul von Hindenburg, y el Generalquartiermeister, Erich Ludendorff. El mismo Hindenburg había asumido el papel de comandante en jefe nombrado por el Káiser y Ludendorff fue de hecho el verdadero jefe general del personal. El propio Káiser ya no era visto como una figura de héroe para los alemanes, mientras que Hindenburg y Ludendorff fueron vistos como verdaderos líderes heroicos de la nación. El Káiser siguió siendo una figura emblemática los dos años restantes de la guerra hasta su abdicación en 1918.


El final del imperio

Tras el asesinato en 1914 del archiduque Francisco Fernando de Habsburgo, el Káiser Guillermo II ofreció al emperador austrohúngaro, Francisco José I, apoyo completo para los planes de Austria-Hungría de invadir el Reino de Serbia, a la que la primera culpó del asesinato. Este apoyo incondicional de Austria-Hungría fue llamada "cheque en blanco" por los historiadores, lo que dio un permiso de agresión austrohúngara, independientemente de las consecuencias diplomáticas.



Insignia de guerra de Alemania (1903-1918)


Pero cuatro años más tarde, en noviembre de 1918, ante la revolución interna, una guerra estancada, Austria-Hungría cayendo a pedazos desde múltiples tensiones étnicas, y la presión del alto mando alemán, Guillermo II abdicó, junto con el jefe del alto mando alemán. Quedaba una situación desastrosa que contribuyó a que el nuevo gobierno liderado por los socialdemócratas alemanes pidiera y recibiera un armisticio y marcara el final de la Primera Guerra Mundial y el Imperio alemán. Éste fue seguido por la democracia y por la inestabilizada República de Weimar.

viernes, 26 de noviembre de 2010

La unión de los estados alemanes

La Confederación Germánica (en alemán, Deutscher Bund, «Confederación Alemana») fue una unión establecida en 1815 por el Congreso de Viena que agrupó a 39 estados alemanes en una confederación de estados soberanos bajo la presidencia de la Casa de Austria. Sucedió a la Confederación del Rin, creada en 1806 por Napoleón I en sustitución del Sacro Imperio Romano Germánico.


Bandera de la Deutscher Bund


Creada para mantener la seguridad de los múltiples pequeños estados del desaparecido Sacro Imperio Romano Germánico, la Confederación no suponía ninguna concesión al creciente nacionalismo alemán, por no ser éste del agrado de Viena.


Los Estados miembros

· Imperio de Austria
· Reino de Baviera
· Reino de Hannover
· Reino de Prusia
· Reino de Sajonia
· Reino de Wurtemberg
· Principado de Hesse-Cassel
· Gran Ducado de Baden
· Gran Ducado de Hesse-Darmstadt
· Gran Ducado de Luxemburgo
· Gran Ducado de Mecklembourg-Schwerin
· Gran Ducado de Mecklembourg-Strelitz
· Gran Ducado de Sajonia-Weimar-Eisenach
· Ducado de Anhalt-Bernbourg
· Ducado de Anhalt-Cothen
· Ducado de Anhalt-Dessau
· Ducado de Brunswick


Mapa de la Confederación


· Ducado de Holstein
· Ducado de Limbourg (a partir de 1839)
· Ducado de Nassau
· Ducado de Oldenbourg (Gran Ducado a partir de 1829)
· Ducado de Sajonia-Altenburgo
· Ducado de Sajonia-Coburgo-Gotha
· Ducado de Sajonia-Hildburghausen
· Ducado de Sajonia-Meiningen
· Landgraviato de Hesse-Homburg
· Ciudad de Bremen
· Ciudad de Francfort del Meno
· Ciudad de Hamburgo
· Ciudad de Lübeck
· Once principados (entre ellos, el Principado de Liechtenstein, el Principado de Hohenzollern-Sigmaringen, el Principado de Lippe y el Principado de Waldeck).

Monarcas de los estados miembros de la Confederación Germánica en el encuentro de Fráncfort del Meno (Palais von Thurn und Taxis, 1º de setiembre de 1863)


  • El Imperio Austríaco y el Reino de Prusia fueron los más grandes y, por lejos, los más poderosos miembros de la Confederación. Enormes porciones de ambos países no estaban incluidas en la Confederación porque no habían sido parte del antiguo Sacro Imperio Romano, ni la mayor parte de sus fuerzas armadas fueron incorporadas al ejército federal. Cada uno de ellos tenía un voto en la Asamblea Federal.

  • Tres estados miembros estaban gobernados por monarcas extranjeros: el Rey de Dinamarca, el Rey de los Países Bajos y el Rey de Gran Bretaña (hasta 1837), quienes eran miembros de la Confederación Alemana, el primero como Duque de Holstein, el segundo como Gran Duque de Luxemburgo y Duque de Limburgo y el último como Rey de Hannover. Cada uno de ellos tenía un voto en la Asamblea Federal.

  • Seis de los otros grandes estados tenían un voto cada uno en la Asamblea Federal: el Rey de Baviera, el Rey de Sajonia, el Rey de Württemberg, el Príncipe-Elector de Hesse, el Gran Duque de Baden y el Gran Duque de Hesse.

  • Veintitrés pequeños estados miembros compartían cinco votos en la Asamblea Federal.

  • Las cuatro Ciudades Libres de Bremen, Frankfurt, Hamburgo y Lübeck compartían un voto en la Asamblea Federal.

El canciller austríaco Klemens Wenzel von Metternich dominó la Confederación Alemana entre 1815 y 1848


La Dieta, que no era un parlamento de representantes elegidos por el pueblo sino un congreso de legados con sede en Fráncfort del Meno, fue su única entidad central, aunque en 1834 se estableció la Unión Aduanera de Alemania y, con ello, se creó un mercado interno unitario para la mayoría de estados.

La Revolución de 1848 tuvo gran resonancia en Alemania. En marzo se produjeron en todos los Estados de la Confederación alzamientos populares que obligaron a los príncipes a hacer concesiones, que llevaron al surgimiento de los primeros parlamentos verdaderamente representativos.

La disputa entre los dos estados miembros dominantes de la Confederación, Austria y Prusia, sobre cuál de los dos tenía el derecho inherente a gobernar las tierras alemanas, terminó a favor de Prusia después de la Guerra Austro-Prusiana en 1866 y el colapso de la confederación. Esto dio lugar a la creación de la Confederación Alemana del Norte, con un número de estados del sur de Alemania manteniéndose independientes, aunque aliados primero con Austria (hasta 1867) y luego con Prusia (hasta 1871), lo que sirvió de preámbulo al gran Imperio Alemán.


Federico Guillermo IV, Rey de Prusia, en traje de coronación (1840)


La letra del Himno de Alemania dice: Von der Maas bis an die Memel,von der Etsch bis an den Belt ( Desde el río Mosa hasta el Memel,/ desde el río Adigio hasta el Belt). Esto hace alusión a las fronteras de los 38 estados que componían la Confederación Germánica.


Legado territorial

Los actuales países cuyo territorio fue parcialmente o enteramente localizado dentro de los límites de la Confederación Alemana son:

· Alemania (todos los estados excepto parte de Schleswig-Holstein)
· Austria (todos los estados excepto Burgenland)
· Luxemburgo (todo el territorio)
· Liechtenstein (todo el territorio)
· Países Bajos (provincia de Limburgo; se unió a la Confederación después 1839)
· República Checa (todo el territorio)
· Eslovenia (excepto por Prekmurje y las municipalidades de Koper, Izola y Piran)
· Polonia (Voivodado de Pomerania Occidental, Voivodado de Lubusz, Voivodado de Baja Silesia, Voivodado de Opole, parte de Silesia)
· Bélgica (comunidad germano-parlante y algún territorio al este de la provincia de Lieja); la provincia entera de Luxemburgo había dejado la Confederación al adherirse a Bélgica en 1839)
· Italia (región autónoma de Trentino-Alto Adigio, provincia de Trieste, la mayor parte de la provincia de Gorizia excepto el enclave Monfalcone y las municipalidades de Tarvisio, Malborghetto Valbruna, Pontebba, Aquileia, Fiumicello y Cervignano en la provincia de Udine)
· Croacia (el territorio Pazin en el condado de Istria y la franja costera entre Opatija y Plomin en la región de Liburnia)
· La corona danesa había sido miembro solo como líder de su ducado de Holstein. Schleswig se unió por primera vez como parte de Prusia luego de la Segunda Guerra de Schleswig (1864).


"Germania", pintura al fresco creada durante las Revoluciones de 1848 para ser usada como decoración alegórica en la Asamblea Nacional del Parlamento de Frankfurt



miércoles, 24 de noviembre de 2010

Las consortes de Prusia

La Reina de Prusia era la reina consorte del gobernante del Reino de Prusia, desde su creación en 1701 hasta su abolición en 1918. Como todos los gobernantes de Prusia debían ser hombres, nunca hubo una Reina reinante de Prusia. Hasta 1806, la Reina de Prusia fue también Electriz de Brandeburgo; después de 1871, también fue emperatriz alemana. Hasta 1772, su título fue Reina de Prusia.
Bandera del Reino de Prusia (1701)

Duquesas de Prusia

  • Dorotea de Dinamarca, hija de Federico I de Dinamarca (1504-1547), consorte de Alberto I
  • Ana María de Brunswick-Calenberg-Göttingen, hija de Eric I, duque de Brunswick-Calenberg-Göttingen (1532-1568), segunda consorte de Alberto I
  • María Eleonora de Cleves, hija de Guillermo, duque de Jülich-Cleves-Berg (1550-1573), consorte de Alberto Federico II
Marie Eleonore von Jülich-Kleve-Berg


  • Ana de Prusia, hija de Federico Alberto, duque de Prusia (1576-1625), consorte de Juan Segismundo, Elector de Brandeburgo
  • Isabel Carlota del Palatinado, hija de Federico IV, Elector Palatino (1597-1660), consorte de Jorge Guillermo, Elector de Brandeburgo
  • Luisa Enriqueta de Orange-Nassau, hija de Federico Enrique, Príncipe de Orange(1627-1646), consorte de Federico Guillermo de Brandeburgo
  • Dorotea Sofía de Schleswig-Holstein-Sonderburg-Glücksburg, hija de Felipe, duque de Schleswig-Holstein-Sonderburg-Glücksburg (1636-1689), segunda consorte de Federico Guillermo

Dorothea Sophie von Schleswig-Holstein-Sonderburg-Glücksburg
  • Sofía Carlota de Hannover, hija de Ernesto Augusto, Elector de Hannover (1668-1705), consorte de Federico III de Brandeburgo

Reinas en Prusia

Rey en Prusia fue un título usado por los Electores de Brandeburgo desde 1701 hasta 1772. Además de su electorado, que formaba parte del Sacro Imperio Romano, también gobernaba el Ducado de Prusia, que estaba fuera del Imperio y del que era pleno soberano desde 1656. En 1701, el elector Federico III quiso mostrar su grandeza al adoptar el título de rey. En el momento sólo había tres títulos reales dentro del Imperio: "Rey de los alemanes" (un título en poder del emperador), "Rey de Bohemia" (a menudo en poder del emperador también) y "Rey de los Romanos" (portado por el heredero del emperador).

A cambio de la asistencia de los Hohenzollern en la Guerra de Sucesión Española y el apoyo al candidato Habsburgo en la elección siguiente, el emperador Leopoldo I permitió a Federico que se coronara a sí mismo "Rey en Prusia", no "Rey de Prusia": Federico era sólo un elector en sus dominios dentro de las fronteras del Imperio, no un rey.

Sophie Charlotte Herzogin von Braunschweig und Lüneburg

Aun así, su movimiento fue controvertido, y sólo fue aceptado ampliamente después del Tratado de Utrecht en 1713. El título de "Rey de Prusia" implicaba señorío sobre toda la región prusiana y no simplemente el Ducado de Prusia y la asunción de dicho título por los margraves Hohenzollern habría amenazado a la vecina Polonia (como la provincia de Prusia Real era parte del Reino de Polonia, los reyes polacos se auto-titularon Reyes de Prusia hasta 1742).
  • Sofía Carlota de Hannover, hija de Ernesto Augusto, Elector de Hannover (1668-1705), consorte de Federico I
  • Sofía Luisa de Mecklemburgo-Schwerin, hija de Federico, duque de Mecklemburgo-Grabow (1685-1735), segunda consorte de Federico I
  • Sofía Dorotea de Hannover, hija de Jorge I de Gran Bretaña (1687-1757), consorte de Federico Guillermo I
  • Isabel Cristina de Brunswick-Bevern, hija de Fernando Alberto II, duque de Brunswick-Lüneburg (1715-1797), consorte de Federico II
Elisabeth Christine von Braunschweig-Wolfenbüttel-Bevern


Reinas de Prusia

Luego de anexar la mayor parte de Prusia Real en la primera partición de Polonia de 1772, Federico el Grande cambió su título de “Rey en Prusia” por “Rey de Prusia”. Su consorte, por ende, pasó a ser llamada “Reina de Prusia”.
  • Isabel Cristina de Brunswick-Bevern (1715-1797), hija de Fernando Alberto II, duque de Brunswick-Lüneburg, consorte de Federico II
  • Federica Luisa de Hesse-Darmstadt (1751-1805), hija de Luis IX, Landgrave de Hesse-Darmstadt, consorte de Federico Guillermo II
  • Luisa de Mecklemburgo-Strelitz (1776-1810), hija de Carlos II, Gran Duque de Mecklemburgo-Strelitz, consorte de Federico Guillermo III
  • Isabel Ludovica de Baviera (1801-1873), hija de Maximiliano I José de Baviera, consorte de Federico Guillermo IV
Elisabeth Ludovika, Prinzessin von Bayern

  • Augusta de Sajonia-Weimar-Eisenach (1811-1890), hija de Carlos Federico, Gran Duque de Sajonia-Weimar-Eisenach, consorte de Guillermo I, Emperador de Alemania
  • Victoria, Princesa Real (1840-1901), hija de Alberto, Príncipe Consorte del Reino Unido, consorte de Federico III, Emperador de Alemania
  • Augusta Victoria de Schleswig-Holstein (1858-1921), hija de Federico VIII, duque de Schleswig-Holstein, consorte de Guillermo II, Emperador de Alemania
Prinzessin Auguste Viktoria Friederike Luise Feodora Jenny von Schleswig-Holstein-Sonderburg-Augustenburg

martes, 23 de noviembre de 2010

El águila prusiana

El Ducado de Prusia o Prusia Ducal (alemán: Herzogtum Preußen; latín: Ducatus Prussiae) fue un ducado de la parte oriental de Prusia desde 1525 a 1701, que se constituyó en el primer ducado protestante (luterano) con una población dominante de habla alemana, así como minorías de polacos y lituanos.

En 1525, durante la Reforma Protestante, el Gran Maestre de los Caballeros Teutónicos, Albrecht de Brandeburgo-Ansbach, miembro de una rama menor de la Casa de Hohenzollern, secularizó el territorio prusiano de la orden, convirtiéndose en Albrecht, duque de Prusia. Su ducado, que tenía su capital en Königsberg, fue establecido como feudo de la corona de Polonia (Segismundo I el Viejo de Polonia era su tío).

Armas de Prusia Ducal


Fue heredado por los Hohenzollern, príncipe-electores de Brandeburgo en 1618; esta unión personal ee referida como Brandeburgo-Prusia. Federico Guillermo, el "Gran Elector" de Brandeburgo, logró la plena soberanía sobre el territorio en Tratado de Wehlau de 1657, que se confirmó en el Tratado de Oliva tres años después. El Ducado de Prusia fue elevado a Reino en 1701.

Historia

En un acuerdo negociado por parte de Lutero, la Prusia Ducal se convirtió en el primer estado protestante, anticipándose a las dispensas de la Paz de Augsburgo de 1555. La "S" en el escudo de armas del ducado representaba al soberano de Alberto, Segismundo Jagellon. Carlos V y el Papa Clemente VII se opusieron al Homenaje Prusiano.

Alberto, Duque de Prusia (y sus hermanos), reciben Prusia del Este como feudo de manos del rey Segismundo I de Polonia en 1525


El 01 de marzo 1526 el 1r Duque de Prusia se casó con la princesa Dorotea, hija del rey Federico I de Dinamarca, estableciendo así los lazos políticos entre el luteranismo y Escandinavia. A pesar de su credo protestante, Alberto fue impulsado por su hermano mayor Jorge, Margrave de Brandeburgo-Ansbach, quien ya había establecido la religión protestante en sus territorios de Franconia y la Alta Silesia. Administrativamente, hubo pocos cambios en la transición de los Caballeros Teutónicos al gobierno ducal. A pesar de que era formalmente un vasallo de la corona de Polonia, Alberto mantuvo el autogobierno para Prusia, su propio ejército, la acuñación de su moneda, una asamblea provincial (la Dieta prusiana o Landtag) y una autonomía sustancial en los asuntos exteriores.

Cuando Alberto murió en 1568, su hijo adolescente (edad exacta se desconoce) Alberto Federico heredó el ducado. Joaquín II, Elector de Brandeburgo, aseguró el co-vasallaje (Mitbelehnung) del ducado en el mismo año. La administración en el ducado se redujo así como Alberto Federico incrementó su debilidad mental, lo que llevó al Margrave Jorge Federico de Brandeburgo-Ansbach a convertirse en regente de Prusia en 1577.



Transición a Brandeburgo-Prusia en 1618

Como Alberto Federico no tuvo herederos varones sobrevivientes, el Tratado de Varsovia en 1611 permitió que su yerno (esposo de su hija Anna de Prusia), el Elector Juan Segismundo, de la rama de los Hohenzollern en Brandeburgo, se convirtiera en el sucesor legal del duque. En 1618 estalló la Guerra de los Treinta Años y Alberto Federico murió, por lo que el ducado pasó a Juan Segismundo, quien murió al año siguiente. El hijo de éste, Jorge Guillermo, fue investido con el ducado en 1623 por el rey de Polonia Segismundo III Vasa, con lo que fue confirmada la unión personal de Brandeburgo-Prusia.

Muchos prusianos se opusieron a ser gobernados por la Casa de Hohenzollern de Berlín e hicieron un llamamiento a Segismundo III para su compensación, o incluso la incorporación de la Prusia Ducal al reino de Polonia, aunque sin éxito. Brandeburgo, siendo un feudo del Sacro Imperio Romano, y Prusia Ducal, siendo un feudo polaco, hicieron jurídicamente imposible una unión real fronteriza. De hecho Brandeburgo y Prusia Ducal fueron cada vez más gobernados como uno y coloquialmente era denominado como Brandeburgo-Prusia.

La Duquesa Anna de Prusia y Jülich-Cleves-Berg (1576 – 1625), hija del Duque de Prusia y esposa de Juan Segismundo, Elector de Brandeburgo.


Federico Guillermo el Gran Elector, duque de Prusia y príncipe-elector de Brandeburgo, adquirió después Prusia Real para poder conectar territorialmente sus dos feudos. Sin embargo, durante la Segunda Guerra del Norte, Carlos X Gustavo de Suecia invadió Prusia Ducal y dictó el Tratado de Königsberg (enero 1656), lo que hizo del ducado un feudo sueco. En el posterior Tratado de Marienburg (junio 1656), el rey de Suecia se comprometió a ceder a Federico Guillermo el Principado-Obispado de Ermland y cuatro voivodados polacos, si éste apoyaba el esfuerzo de Carlos Gustavo. El acuerdo fue una mera especulación, ya que Federico Guillermo definitivamente tendría que proporcionar apoyo militar, mientras que el premio era sólo bajo la condición de una victoria. Cuando la marea de la guerra se volvió contra Carlos X Gustavo, éste concluyó el Tratado de Labiau (noviembre de 1656), haciendo de Federico Guillermo I, el único soberano en Prusia Ducal y Ermland.

El Rey Juan II Casimiro de Polonia, a cambio de que Federico Guillermo renunciara a la alianza prusiano-sueca, reconoció la plena soberanía del Gran Elector sobre el Ducado de Prusia. Después de casi 200 años de soberanía polaca sobre el Estado Monástico-Teutónico de Prusia y de su sucesor Prusia Ducal, se recuperó la plena soberanía. Por lo tanto, Ducado de Prusia se convirtió en la denominación más adecuada para el estado. Esa plena soberanía era un requisito previo necesario para que Prusia Ducal se convirtiera en el soberano Reino de Prusia, que no debe confundirse con la Prusia Real polaca.

Friedrich Wilhelm von Brandenburg, Duque de Brandeburgo-Prusia (1620-1688)


Federico Guillermo fue el verdadero artífice del poderío prusiano; ante la dispersión geográfica de sus dominios, él se centró en su electorado, donde afirmó su autoridad estableciendo un mecanismo institucional adecuado, con una serie de innovaciones en todo sentido. Su hijo, Federico III de Brandeburgo, siguió sus pasos pero intentando ampliar considerablemente los objetivos de los Hohenzollern, y logrando satisfacción con la transformación de sus territorios en reino independiente; el estallido de la Guerra de Sucesión española le dio la oportunidad de conseguir plena soberanía para sus dominios a cambio de ayuda militar al emperador.

Reino en 1701

Federico III, quien a pesar de no estar a la altura como príncipe de su antecesor, el Gran Elector, supo por lo menos conseguir del emperador la autorización necesaria para que el Ducado de Prusia, que ya estaba bajo la plena soberanía del electorado de Brandeburgo desde 1657, se convirtiera en Reino. Como rey de Prusia utiliza el nombre de Federico I, título que recibiría desde 1701, con lo que se incrementaba su significación sobre los demás príncipes del Imperio y se reafirmaba la superioridad del electorado de Brandeburgo-Reino de Prusia en la mitad norte del conglomerado imperial.
Friedrich I von Hohenzollern, 1r Rey de Prusia (Friedrich III, Margrave Elector de Brandeburgo)


Intentar acabar con la desunión y descentralización política de Alemania fue uno de los objetivos principales que se marcó Leopoldo I, en el transcurso de su largo reinado durante la segunda mitad de la centuria. Anteriormente ya se había producido un avance importante en esta dirección cuando, en plena guerra de los Treinta Años, la Monarquía austriaca pudo controlar más eficazmente el territorio checo imponiendo en Bohemia un régimen hereditario, católico y sometido a la Corte de Viena, plan que posteriormente se empezó a aplicar al Reino de Hungría.

Después de la anexión de Prusia Real al Reino de Prusia en 1772, la antigua Prusia Ducal incluyendo Warmia (alemán: Ermland) fue reorganizada en la Provincia de Prusia Oriental , mientras que la mayoría de la antigua Prusia Real se convirtió en la Provincia de Prusia Occidental. El Reino de Prusia, entonces consistente en Prusia Oriental y Occidental, al ser un estado soberano, y Brandeburgo, un feudo en el Santo Imperio Romano, se fusionaron legalmente sólo después de la disolución de este último en 1806 como resultado de las victorias de Napoleón Bonaparte sobre Austria.

El Rey Federico II (centro) en Sanssouci con Voltaire (izquierda) y los principales científicos de la Academia de Ciencias de Berlín, 1750.


A partir de ese año el título de Kurfürst (Príncipe elector) de Brandeburgo ya no tenía sentido y se suprimió. Antes de eso, el soberano Hohenzollern había ostentado muchos títulos, desde el de Jefe de la Iglesia Evangélica hasta el de Rey, Elector, Gran Duque y Duque de varias regiones y reinos bajo su gobierno. Después de 1806, era simplemente el de Rey de Prusia.

Después del Tratado de Tilsit en 1807, Prusia perdió casi la mitad de su territorio, incluidas las tierras ganadas en las Segunda y Tercera Particiones de Polonia (que ahora se resumía al Ducado de Varsovia) en las tierras al oeste del río Elba. Lo que quedó del Reino fue ocupado por las tropas francesas (pagando Prusia todos los gastos de su manutención) y el rey estuvo obligado a hacer una alianza con Francia y adherirse al Bloqueo Continental.

Corona de los reyes de Prusia (Colección del Castillo de Hohenzollern)


Tras la derrota de Napoleón en Rusia, Prusia se desvinculó de la alianza y participó del lado de la Sexta Coalición durante las "Guerras de Liberación" (Befreiungskriege) contra la ocupación francesa. Las tropas prusianas contribuyeron de forma crucial en la Batalla de Waterloo de 1815 a la victoria final sobre Napoleón.

La recompensa de Prusia vino con el Congreso de Viena, en el que Prusia recuperó la mayor parte de sus territorios perdidos e incluso ganó el 40% del Reino de Sajonia y la mayor parte de Renania. Debido a estas nuevas adquisiciones prusianas, el reino se reorganizó en diez provincias y su mayor parte pasó a integrar la Confederación Germánica, que sustituyó al extinto Sacro Imperio Romano Germánico.


La bandera de guerra prusiana (1816)

En 1867 ésta fue sustituida por la Confederación Alemana del Norte, bajo el dominio de Prusia, y con alianzas militares con los estados germanos del Sur (excepto Austria). La unificación de Alemania Kleindeutschland planeada por Bismarck estaba muy cerca de concretizarse. El acto final fue la Guerra Franco-prusiana (1870). Mediante la activación de las alianzas alemanas establecidas tras la Guerra, los Estados Germanos se unieron y derrotaron rápidamente a Francia. Esta victoria comandada por Prusia posibilitó la creación del Imperio alemán, y Guillermo fue proclamado Káiser el 18 de enero de 1871 (justo 170 años después de la coronación del primer rey prusiano, Federico I).




domingo, 21 de noviembre de 2010

El penúltimo Emperador


Carlos VI (1685 - 1740) fue el penúltimo soberano del imperio de los Habsburgo. Sucedió a su hermano mayor, José I , como emperador del Sacro Imperio, Rey de Bohemia, Croacia y Hungría, Archiduque de Austria, etc., en 1711. Fue conocido como Archiduque Carlos de Austria y Carlos III de España durante la Guerra de Sucesión Española. Con Isabel Cristina de Brunswick-Wolfenbüttel tuvo sus dos hijas: María Teresa, nacida en 1717, última soberana de Austria, y Ana María, nacida en 1718, Gobernadora de los Países Bajos austriacos.

Cuatro años antes del nacimiento de María Teresa, debido a su falta de herederos varones, Carlos promulgó en 1713 la Pragmática Sanción, que establecía que su reino no podía ser dividido y permitía que los herederos al trono pudieran ser mujeres. De esta manera favorecía en la sucesión a sus hijas sobre los hijos de su hermano mayor y predecesor, José I, ignorando el decreto que había firmado durante el reinado de su padre, Leopoldo I. Cuando murió en 1740, se desató la Guerra de Sucesión de Austria, que asoló a su sucesor, María Teresa, durante ocho años.


Alegoría del Sacro Emperador Romano Carlos VI


El Archiduque Carlos (Carolus Franciscus Josephus Wenceslaus Balthasar Johannes Antonius Ignatius) de Austria era el segundo hijo que el emperador Leopoldo I tuvo con su tercera esposa, la Princesa Eleanor Magdalena del Palatinado-Neoburgo.

Al morir Carlos II de España sin herederos, fue uno de los pretendientes a la corona española y participó en la Guerra subsiguiente en contra de Felipe V, el nieto de Luis XIV de Francia. Portugal, Inglaterra, Escocia, Irlanda y la mayoría del Sacro Imperio Romano apoyaron su candidatura. Los reinos peninsulares de la Corona de Aragón le reconocieron como rey, con el nombre de Carlos III. Estando la guerra en curso, su hermano José I murió repentinamente sin sucesión, por lo que el trono imperial recayó en él.


Carlos III rey de Aragón (1706-1707), rey de Valencia (1706-1707), conde de Barcelona (1706-1714).


En 1711 fue coronado Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico en Fráncfort del Meno, renunciando a la corona de España (tratados de Utrecht y Rastadt) a cambio de los Países Bajos españoles, el Milanesado, Nápoles y Cerdeña (que cambió al duque de Saboya en 1720 por Sicilia). Luchó contra los turcos (1716-1718), conquistando la mayor parte de Valaquia y Serbia, pero luego perdió gran parte de estas conquistas en una guerra posterior (1737-1739). Aunque Carlos parece haber sido algo torpe en los asuntos políticos, la monarquía austríaca alcanzó su mayor expansión durante su reinado.




Firma del emperador



Carlos estaba extremadamente descontento ante la pérdida de España y, como resultado, imitó en Viena el serio ceremonial cortesano de los Habsburgo españoles (Spanisches Hofzeremoniell), adoptando la vestimenta de un monarca español, el cual, según el historiador británico Edward Crankshaw, consistía en "un jubón negro y manguera, zapatos negros y medias escarlata". Probablemente como consecuencia de sus años en España, decidió construir la escuela de equitación española, así como la Reichskanzlei (Cancillería del estado) y la Biblioteca Nacional. Durante su reinado se crearon la mayor parte de las obras más importantes del barroco en Viena. También tuvo ambiciones musicales: componía, tocaba el clave y dirigía la orquesta de la corte.

Káiser Karl VI

Reinado imperial


La incapacidad de su esposa Isabel Cristina para producir herederos varones irritó a Carlos y condujo a la promulgación de la Pragmática Sanción de 1713, un documento que abolió la sucesión únicamente masculina (hasta la fecha efectiva en todos los reinos Habsburgo) y declaró sus tierras indivisibles. Carlos buscó la aprobación de las otras potencias europeas, aunque éstas plantearon duros términos: Inglaterra exigió que Austria aboliera su empresa de comercio exterior (Ostende Co.). En total, Gran Bretaña, Francia, Sajonia-Polonia, la República de Holanda, España, Venecia, los Estados de la Iglesia, Prusia, Rusia, Dinamarca, Saboya-Cerdeña, Baviera y la Dieta del Sacro Imperio Romano reconocieron la sanción. Francia, España, Polonia y Sajonia, Baviera y Prusia, más tarde la renegaron.

La emperatriz consorte


Carlos libró un productivo conflicto contra el Imperio Otomano desde 1716 hasta 1718. Austria salió de esta guerra con ganancias considerables en Serbia y el Reino de Hungría, extendiendo su imperio hasta el Danubio. Siguió otra guerra, la de la Cuádruple Alianza, que también terminó en una victoria para Austria; por el Tratado de La Haya, Carlos cambió Cerdeña, que pasó al duque de Saboya, Víctor Amadeo II, por Sicilia, la isla más grande del Mediterráneo, que era más difícil de defender de la agresión extranjera que Cerdeña. El tratado también reconoció al hijo de Felipe V de España, Don Carlos, como heredero del Ducado de Parma y el Gran Ducado de Toscana; Carlos había aprobado antes la sucesión de la hija del actual Gran Duque Cosme III de Médicis, Anna Maria Luisa, Electora Palatina.



Maria Theresa von Habsburg

El tema del matrimonio de su hija mayor comenzó desde su niñez. Primero fue comprometida a Leopoldo Clément, Príncipe Heredero de Lorena, con quien iba a encontrarse en 1723. Pero al morir éste de viruela, su hermano menor, Francisco Esteban, fue invitado a Viena. Carlos consideró otras posibilidades (por ejemplo, casarla con el futuro Carlos III de España) antes de anunciar el compromiso de la pareja. Francia exigió que el prometido de María Teresa renunciara a su ancestral Ducado de Lorena para dar cabida a Stanislaw Leszczynski, el depuesto rey de Polonia. El padre de María Teresa obligó entonces a Francisco a renunciar a sus derechos sobre Lorena y le dijo: "No hay renuncia, no hay archiduquesa". Se casaron en febrero de 1736 y Lorena fue transferido a Francia en julio de 1737.



Maria Anna von Habsburg


En 1737, el Emperador se embarcó en otra guerra turca con Rusia. A diferencia de la confrontación anterior, terminó en una derrota decisiva de Austria. Los avances territoriales efectuados en la última Guerra Turca, en Bosnia, Serbia y Oltenia (Pequeña Valaquia), fueron borrados. El descontento popular por la costosa guerra reinó en Viena. Como resultado de ello, Francisco de Lorena, el consorte de María Teresa, fue considerado un espía francés por los vieneses.

Desayuno de bodas de María Teresa y Francisco Esteban

Muerte y legado

En el momento de su muerte, las tierras de los Habsburgo estaban saturadas de deudas, el tesoro contenía apenas 100.000 florines; la deserción era moneda corriente en el ejército de Austria, difundido en todo el Imperio en pequeños e ineficaces cuarteles. Los contemporáneos esperaban que Austria-Hungría en sí misma torciera el yugo de los Habsburgo después de su muerte.


El Palais Augarten

El emperador murió el 20 de octubre 1740 en el Palais Augarten de Viena. La obra máxima de su vida, la Pragmática Sanción, fue en vano. María Teresa se vio obligada a recurrir a las armas para defender su herencia de la coalición de Prusia, Baviera, Francia, España, Sajonia y Polonia -todos partidarios de la sanción- que asaltaron la frontera austriaca semanas después de su muerte. Resultado: María Teresa perdió el rico ducado de Silesia en Prusia y el Ducado de Parma en España.